Champú Oblepikha cabello débil y dañado | Natura Siberica

¿Quién no ha sufrido mal de amores?

Esa horrible sensación de que el mundo se te acaba. A veces, el amor nos hace tan tontos que, cuando termina, sacamos a relucir toda esa idiotez que llevamos dentro. Nos gusta hacernos los fuertes, decir que no es para tanto, pero la realidad es que el dolor no hay nada que lo pueda paliar. Nada más que el tiempo. Qué guay sería tener un remedio para eso, ¿verdad?

Pues fíjate que a tu pelo le ocurre lo mismo. Después de vivir una intensa relación con los tintes y otros artilugios que belleza capilar, se queda extenuado. Lo absorben de tal manera que no queda más alternativa que cortar por lo sano…

O eso es lo que tú te crees. Existe una forma (y ojalá la hubiera para el amor) de evitar que llegue al desastre. Que repara el dolor progresivamente sin necesidad de alcanzar extremos radicales: el champú para cabello débil y dañado de Natura Siberica.

Si tú pelo no sabe gestionar relaciones, tú tendrás que hacerlo por él.

Lo que más nos gusta

• Esencia siberiana: todos los productos de esta colección tienen como base de su composición el hidrolato de espino amarillo orgánico, o como algunos lo conocen, la oblepikha de altái. ¿No conoces sus beneficios? Entonces ya estás tardando en descubrirlos.
• Mezcla triunfal: además de esta base tan poderosa, la formulación de cada uno de los productos de la línea contiene ingredientes activos orgánicos repletos de vitaminas y nutrientes que aportan múltiples propiedades a tu piel y tu cabello y los convierten en unos privilegiados.
• Origen salvaje: todas y cada unas de las hierbas y flores que encontrarás en esta familia son silvestres y proceden de la naturaleza siberiana más fría. Resisten condiciones climatológicas muy adversas conservando su buen estado y, por ello, son seleccionadas especialmente para transferir sus cualidades a cada formulación en la que se incluyen.

Lo que nos enamora

• La manera que tiene de cuidar el cabello. Lo limpia con delicadeza, lo repara y crea una capa protectora que lo mantiene alejado del daño ambiental.
• Su textura en gel fluida que facilita el aplicado sobre el cabello. Lo nutre, lo llena de vitaminas, le da fuerza, brillo y lo ayuda a incrementar su producción de queratina.
• Su aroma afrutado que endulza cada fibra capilar y hace que su relación con los tintes se vuelva más amable. Sustituye el desagradable olor a amoníaco por una oleada de frescura y frutas tropicales.

Los culpables de su encanto

• Hidrolato de espino amarillo de Altái orgánico: el hidrolato consiste en un cóctel vitamínico y de microelementos resultante del jugo de las plantas y flores siberianas que se obtiene por destilación. En este caso, del espino amarillo. Es un ingrediente que proporciona un cuidado intensivo para el cabello, tal como la hidratación profunda, que da como resultado una suavidad incomparable y un cabello de tacto sedoso.
• Aceite de argán de Marruecos: además de mantener el cabello hidratado, le da disciplina y facilita el peinado. Ayuda a  sellar las puntas abiertas y contribuye a incrementar la producción de queratina.
• Rhodiola Rosea y Cladonia Nevada: contribuyen a la retención de humedad en piel y cabello y aseguran su hidratación por más tiempo. Ayudan a regenerar la estructura de ambos para mantener la suavidad y la elasticidad.
• Vitaminas y aminoácidos: nutren el cabello en profundidad y le dan una reparación intensiva. Son el ingrediente estrella para dar con la receta de la felicidad.

¿Cómo usarlo?

Como usarías un remedio para curar el mal de amores… con esperanza.

Aplica la cantidad equivalente a una avellana sobre el cabello húmedo, asegurándote de cubrir bien toda la zona a limpiar y reparar. Masajea bien con las yemas de los dedos y acláralo con agua tibia. La temperatura es importante para sellar las fibras y garantizar así que absorban todo el producto y la nutrición necesaria.

Truco de la casa:

Para aumentar la efectividad de los productos capilares es importante que trates a tu cabello con cariño. Ya sabes que, si no lo haces, acabarás llorando un amor que no has cuidado. Una buena forma de hacerlo es cepillar el pelo justo antes de cada lavado para evitar mayores enredos y conseguir que el champú incida mejor en las fibras capilares.

Y si puedes hacerlo con un cepillo de madera, mucho mejor. El tipo de cerdas que lleva y su disposición ayudarán a mantener tanto el pelo como tu cepillo más sanos por más tiempo.

Este champú forma parte de la colección Oblepikha Siberica Professional. Así, como recomendación inocente, te diremos que vayas a husmearla y quizás encuentres la rutina perfecta para ti.