Mascarilla capilar volumen Cedro Blanco | Natura Siberica

Venga, Es la hora de levantar la mano.

Porque sabes que a ti también te ha pasado.

Saber que tienes algo a lo que asistir y empezar a preocuparte por tu pelo.

Y pensarás: «Obvio. Por mi pelo, por mi maquillaje, por mi ropa. ¿Acaso no es más que evidente?»

Pues sí. Lo es. Pero nosotros queremos dirigirnos a esas chicas de pelo lacio que una y otra vez lo intentan. El problema es que nunca lo consiguen.

Porque la guerra contra la plancha cuando tienes el pelo más mustio que una cortina no se puede ganar.

Pero tú erre que erre: te pones delante del espejo y lo repasas todo estupendo, hasta que llegas a las raíces. Ahí intentas sacar tu lado de peluquera – ese que no quieres aceptar que no tienes – y desafiar de nuevo la gravedad. Tratas de elevar tu pelo dándole forma ahuecada con la plancha para que se levante un poco y ¿qué consigues?

Un trozo de mechón con forma escalonada todavía más pegado a la cabeza que hace que parezca que te han lamido cinco vacas. No una. Cinco.

Y luego una especie de saliente a partir del primer centímetro que hace un escalón extraño y sigue dejando el resto del pelo ultra plano.

Fantástico. A ver cómo lo arreglas ahora.

Animalico, que lo que tenías que hacer iba mucho más antes que la plancha. Y no te hubiera hecho falta ni tocarla: lo único que necesitabas era esta mascarilla capilar de volumen con cedro blanco. Y luego, secado al aire boca abajo de toda la vida y arreglado.

Si es que… ¿teníamos razón o no? Te había pasado.

Lo que más nos gusta

• Excepcional: como tú. Creada con ingredientes únicos y especiales cuyas propiedades son usadas de forma muy específica. Porque qué tiene una colección si no existe en ella algo que la haga interesante. En este caso, cada uno de los productos que la compone está basado en un elemento principal cuyo potencial es la esencia de su acción. Caviar de Rusia, Cedro Blanco, Rosa Ártica, Abedul de Plata… auténticas joyas de la naturaleza.
• De belleza nórdica: esa que tanto nos gusta. Delicada, femenina, sencilla, con un punto de majestuosidad. Esa es la inspiración que rodea esta colección, que fue diseñada originalmente pensando en el corazón de Dinamarca: Copenhagen. Una línea que emula la hermosura de este país y los preciosos parajes que hay en él.
• Con elegancia natural: como la que puedes encontrar en ti por mucho que pasen los años. Porque está creada con algas de las Islas Faroe y plantas y bayas siberianas de origen silvestre. ¿Dónde encontrarás más pureza? Pues quizás lo hagas en tu interior después de ver que, con esta colección a tu lado y, con lo que tú quieras, hay belleza en cada parte de tu ser. Qué profundo nos ha quedado eso, ¿verdad?

Lo que nos enamora

• A parte de lo que es obvio, es decir, el aporte de volumen, nos gusta que no se limite a ese campo. También nutre el cabello y lo fortalece, proporcionándole elasticidad y contribuyendo a reducir la electricidad estática (muy habitual en los cabellos lacios, por otra parte). Y por si eso te parecía poco, también facilita el peinado. Que parece que no, pero los nudos en nuestras melenas delicadas aparecen más rápido que las hormigas con el azúcar.
• Textura  semi-densa, con un punto gelatinoso, muy agradable al tacto y suave. Al aplicarla crea una sensación reconfortante que se intensifica con los resultados que da al retirarla: un cabello regenerado, con más fuerza, brillante y revitalizado. Bueno y, obviamente, con más volumen.
• Aroma súper agradable. Casi adictivo, con una mezcla entre dulce y floral que te engancha. Refuerza la sensación de confort y solo da ganas de repetir y dejar atrás las manualidades con la plancha.

Los culpables de su encanto

• Extracto de cedro blanco: lo de ser el protagonista de esta composición tiene una razón de ser que te va a gustar. Es rico en vitamina A, aminoácidos y microelementos esenciales que contribuyen a reforzar la estructura capilar, acelerando su proceso de regeneración para que acabe siendo más brillante y enérgico.
• Extracto de lino: también contiene vitaminas, concretamente A, B y E, además de ácidos grasos insaturados. Con todo ello, ayuda a hidratar el cabello de raíz a puntas y nutrirlo en profundidad, consiguiendo una suavidad y un tacto súper sedoso.
• Queratina hidrolizada: si hay alguna razón para amar esta mascarilla (además de todas las que ya conoces), es este ingrediente. Ella es la que se encarga de mantener un volumen óptimo en el cabello y darle elasticidad para que no acabe perdiendo la forma y rompiéndose con facilidad.
• Proteínas hidrolizadas de trigo y aminoácidos: y, por si no había suficiente con la queratina, este combo de nutrientes también contribuye a mantener el volumen que estás buscando en el cabello. Además, participa de la restauración de la estructura capilar, haciendo que recupere la fuerza y se sienta más sano.
• Extracto de algas de las Islas Faroe: lo mejor que contiene este ingrediente es su combo de nutrientes. Por un lado, vitaminas, que no son pocas: A, B1, B2, B6, B12, C y E. Por otro,  microelementos y yodo. Pero lo más importante que debes saber es que todos ellos, juntos, hacen que tu cabello esté sano, gracias al aporte de nutrición que le dan, y la muestra es que después de usar la mascarilla lo verás más brillante.
• Complejo de saponinas, taninos y fitoncidas: todas ellas son las que se ubican en las hierbas silvestres de las que te hablábamos. Y su acción también es necesaria, ya que nutren e hidratan el cabello de arriba a abajo, dejándolo suave y sedoso.

¿Cómo usarla?

Como una herramienta a tu favor (no nos puedes decir que no es mucho mejor que chamuscarte el pelo).

Aplica la cantidad equivalente a una avellana sobre el cabello húmedo y limpio, de medios a puntas y asegurándote de cubrirlo bien. Déjala actuar durante diez minutos y aclárala con agua tibia. La temperatura es importante para sellar las fibras y garantizar así que absorban todo el producto y la nutrición necesaria.

Puedes repetir este proceso hasta dos veces por semana. Y nosotros te recomendamos encarecidamente que lo hagas.

Truco de la casa:

Para aumentar la efectividad de los productos capilares es importante que trates a tu cabello con cariño. Y eso implicar no darle demasiado calor, entre otras cosas. Una buena forma de empezar es cepillar el pelo justo antes de cada lavado para evitar mayores enredos y conseguir que la mascarilla incida mejor en las fibras capilares.

Y si puedes hacerlo con un cepillo de madera, mucho mejor. El tipo de cerdas que lleva y su disposición ayudarán a mantener tanto el pelo como tu cepillo más sanos por más tiempo.

También puedes aumentar el tiempo de actuación de la misma (20 minutos, aprox.) colocándola sobre el cabello húmedo y rodeándola con una toalla. Hazlo un rato antes de ducharte y así aprovecharás el calor de la toalla para que el producto vaya incidiendo más en el pelo.

Esta mascarilla forma parte de la colección NS Copenhagen. Mete el hocico en ella y no lo saques hasta que te sientas como una divinidad nórdica. No te engañes, conseguirlo es tan sencillo como ir probando cada uno de sus productos.