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La contaminación: el enemigo invisible de tu melena y de tu piel

La contaminación: el enemigo invisible de tu melena y tu piel

La contaminación: el enemigo invisible de tu melena y de tu piel

La contaminación es la enemiga invisible de tu cabello y tu piel. Y un pequeño gesto puede reparar el desgaste que te produce. Descubre sus efectos y cómo alejarte de ella.

Índice del artículo

Lo que no sabías de la contaminación

Suena la alarma: ¿Qué será? La contaminación.

Inevitablemente, si vives en una ciudad, existen más focos de polución a tu alrededor de lo que puedes pensar. La contaminación es una problemática vital (aunque la gente la obvie) y seguramente conozcas sus efectos secundarios, como que perjudica el estado de los pulmones, ya que son los que inhalan sustancias tóxicas mezcladas con el aire. Sin embargo, tenemos que comunicarte que no es el único órgano que sufre… La piel (por si no lo sabías, también es un órgano) y el cabello son dos de las partes del cuerpo más sensibles a los altos niveles de polución.

El 88% de la población mundial no cumple con los estándares de la Organización mundial de la Salud (OMS) en lo que a inhalación y exposición refiere. La contaminación del aire está formada por compuestos gaseosos y partículas como el material particulado fino, que son especialmente perjudiciales para la piel, causando daños oxidativos que favorecen la deshidratación, la producción de arrugas, la aspereza y la opacidad.

¿Cómo afecta la contaminación a nuestra piel?

Sí, ya, acabamos de mencionarte algunas consecuencias. Pero, en comparación con todas las que hay, esas se quedan muy, pero que muy cortas. La polución y los agentes contaminantes penetran muy fácilmente en nuestro cutis, causando distintos desequilibrios, y lo dañan gravemente de forma progresiva. Ya verás:

  • Aparición de los signos de envejecimiento prematuro en todo tipo de pieles.
  • Los poros se taponan y aumenta la producción de grasa, además de dificultar la oxigenación de la piel.
  • Hiperpigmentación: incrementan las manchas oscuras y las pecas (que no es que no sean monas, pero tampoco necesitamos llevar la piel en estampado a topos).
  • Deshidratación, debilitación del colágeno y la elastina. Además de dejar la piel apagada, arrugada, más seca y sin luminosidad.
  • Puede aumentar la irritabilidad de la piel e incrementar los problemas de las pieles sensibles.
  • Estructura de la piel debilitada y una mayor sensibilidad.
  • Superficie de la piel más sucia.
  • Destrucción de antioxidantes como las vitaminas C y E.
  • Favorece la dermatitis atópica y las reacciones cutáneas.

Después de analizar el impacto de la contaminación en la piel, se ha afirmado que los efectos son tanto inmediatos (deshidratación, opacidad, textura rugosa), como a largo plazo (manchas y arrugas). Además, cuanto peor es la calidad del ambiente, más lo nota nuestra piel (lo cual parece muy evidente, pero no es tan fácil de intuir).

Actualmente existen entre 120.000 y 150.000 sustancias químicas sintéticas con las que convivimos a diario.

El aire que nos rodea y nuestra melena

¿Nunca te has planteado por qué al salir a la calle se te ensucia el pelo más rápido de lo esperado? ¿O por qué cuando vas en tren o en metro te sientes incómodamente sucia?

De la misma forma que la contaminación afecta a la piel, también lo hace en el pelo. Tanto estas partículas finas como otras más grandes, procedentes de la polución – que viene del humo y del gas – entran en contacto directo con la cutícula, robándole brillo y sedosidad. Algo parecido ocurre con el cuero cabelludo: lo irrita y lo sensibiliza. Estas partículas tan simpáticas se adhieren con mucha facilidad, y luego no hay quien las elimine. No es que sea imposible, pero resulta complicado y es por eso que tenemos que ser conscientes y cambiar alguno hábitos. Y todo eso sin tener en cuenta el humo del tabaco, que si lo añadimos a la ecuación ya obtenemos un resultado catastrófico.

Existen multitud de factores que pueden influir negativamente en la salud de tu cabello al margen de la propia contaminación, como el estrés, la mala alimentación o los cambios estacionales. Pero, sin duda, la polución es la guinda del pastel, y así se demostró hace algunos años: provoca debilidad, sequedad, pérdida de brillo y una caída intensa fuera de lo que suele ser normal en una melena sana.

Con la contaminación se produce una pérdida de luminosidad, así como la caída del cabello por mala oxigenación, aparición de caspa… y, por si eso es poco, el pelo que nace es menos sano.

Cómo evitar los efectos de la contaminación en tu cabello de Rapunzel

1. Saber elegir: limpieza con cosmética anti-polución

La más inmediata: la limpieza para eliminar las impurezas. El proceso de lavado debe hacerse con champús específicos que las erradiquen sin arrastrar los aceites naturales de tu melena, además de aportar nutrientes, minerales y antioxidantes. 

A continuación te exponemos algunos productos anti-polución de Natura Siberica que pueden ayudarte a combatir las consecuencias de la contaminación y renovar tu cabello de la raíz a las puntas:

  • Volumen I: lavado

Si hay algo más que básico para retirar la suciedad, es la limpieza (en este caso capilar). Una buena opción es el champú anti-polución para cabello dañado de Natura Siberica. Como la gran mayoría de productos de esta marca, está repleto de ingredientes naturales y nutrientes esenciales que no solo eliminan los residuos de la contaminación, sino que también ayudan a la melena a recuperarse de los daños causados por el estrés ambiental, dejándola completamente suave.

  • Volumen II: hidratación

Limpiar está muy bien pero, al igual que ocurre con el resto del cuerpo, mantenerse hidratado es esencial. Por ello, no hay mejor complemento que el acondicionador anti-polución cabello dañado. Es ideal porque efectúa un efecto protección increíble. Gracias a la unión de elementos extraordinarios que posee, estimula la regeneración del cabello, lo repara y lo mantiene a salvo del estrés ambiental.

  • Volumen III: nutrición

Y cómo no, alimentarlo correctamente ayudará, sin duda alguna, a proporcionarle a tu cabello el nivel de fortaleza necesario para evitar caer en las redes de la contaminación de nuevo. Por ello, la mascarilla anti-polución cabello dañado representa el elemento que cierra este círculo perfecto. Refuerza la protección aportada por el acondicionador a diario y, gracias al complejo de extractos y aminoácidos que contiene, contribuye a regenerar el cabello dañado por el día a día en la ciudad mientras previene la rotura del mismo y de sus puntas.

2. Exfoliación recurrente

Exfoliar el cuero cabelludo permite desprender las partículas tóxicas que se encuentran en el cabello, además de aportarte mil beneficios más como la prevención de su caída, el fortalecimiento de su estructura o la correcta oxigenación de las células de la piel.

Todo ello, manteniendo este hábito (que es más sencillo de lo que parece) de forma periódica, ayudará poco a poco a que tu melena no solo sea visiblemente más sana, sino que también tenga mayor capacidad de reacción ante el ataque de los radicales libres y mejor resistencia en un hábitat como es el de una ciudad envuelta por la contaminación.

3. Buenos hábitos

  • Cuando hablamos de cuidarse, no vale con quedarse en la superficie – y nunca mejor dicho -. Lo ideal es mantener una dieta rica en hierro y omega 3: las legumbres y el pescado son una fuente muy rica en estos dos componentes y, de hecho, son indispensables si quieres conseguir un cabello fuerte y más que sano. Por supuesto, tanto la fruta como las verduras también son alimentos esenciales para una dieta equilibrada, y son altamente beneficiosas para tu melena porque reponen los niveles de antioxidantes necesarios para asegurar una correcta protección de las fibras. Eso por no hablar de su alto contenido en vitaminas, claro está, que ayudan a reforzar su estructura y recuperar su apariencia saludable.
  • El deporte es otro pilar para sentirte sana y fuerte de la cabeza a los pies. Favorece la liberación de endorfinas y, en términos capilares, proporciona un aumento del flujo sanguíneo en el cuero cabelludo, mejorando la dilatación de los vasos sanguíneos y, por ende, la oxigenación del cabello. Eso conlleva una mejor recepción de los nutrientes y, en definitiva, un fortalecimiento del mismo desde la raíz.

No es que queramos convencerte de que te conviertas ahora en fit girl, pero vaya, que adaptando ni que sea un poquito tus hábitos y tus rutinas capilares puedes conseguir unos buenos resultados en lo que a cabellera respecta.

¿Convertirte en melena del año siguiendo estos consejos es posible? Hombre, pues tampoco nos vamos a poner a prometer pero, por lo menos, pasar alguna que otra vez menos por la peluquería, sí. Y peinarte sin que se entere el vecino del séptimo de que lo estás haciendo, también.

Ahora bien, si prefieres mudarte a una zona donde haya cero contaminación también puedes hacerlo – a grandes males, grandes remedios -, pero no lo hagas llevándote un cargamento de M&M’s, a ser posible. Y si lo haces, adminístralos concienzudamente.

Te dejamos meditándolo…

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