Mascarilla facial reparadora | Natura Siberica

Cuánto poder tiene un dulce, ¿verdad?

Si eres amante del azúcar, como nosotros, no podrás negarnos esa tremenda sensación de placer que sientes cuando, después de muchas horas trabajando, llegas a casa y le das un buen mordisco a ese pedazo de chocolate.

A veces puede ser una miseria, pero es más que suficiente para sentir cómo se disparan tus endorfinas y no necesitas nada más en el mundo para ser feliz. Con qué poco nos contentan, eh.

Pues resulta que nosotros aquí somos un tanto avariciosos y queremos más. Por eso te sugerimos que pruebes esta mascarilla reparadora de Natura Siberica que es como miel para los sentidos.

Una pequeña pero potente dosis de dulzura que se reparte por tu rostro, liberándolo de las cargas de todo el día y alargando la sensación revitalizadora que ha iniciado el chocolate. Cualquiera diría que estamos hablando de un producto para la piel.

Lo que más nos gusta

• Sin aditivos: que no los necesitas para nada, como las cargas de más. Porque su composición está llenita de ingredientes totalmente naturales y vegetales que te enriquecen la piel.
• Repleta de energía: porque gracias a la baya siberiana protagonista en esta colección, la oblepikha de altái, se convierte en un aporte de vitamina C que alimenta tu piel de forma natural y le da una dosis de vitalidad.
• Sin complicaciones: por eso se sirve con el clásico dosificador antigoteo, tan sencillo de usar como efectuar un poco de presión y listo. Para que puedas dedicar tus sentidos a disfrutar de sus beneficios.

Lo que nos enamora

• Efecto revitalizante que provoca tras su uso. Recupera la energía natural en la piel y le proporciona nutrición intensa mientras la regenera por completo.
• Textura en crema muy ligera que se extiende fácilmente sobre la piel. Se adapta a cada uno de sus rincones, acabando con la sequedad y ejerciendo en ella un efecto antioxidante.
• Sensación de renovación que provoca en la piel después de retirarla. Como si nunca hubieses sentido el peso de la rutina sobre ti.
• Aroma increíblemente dulce y adictivo que te engancha y convierte esta rutina en una auténtica experiencia sensorial. Imagínate ahora comerte el chocolate mientras llevas la mascarilla puesta. Oh-my-god.

Los culpables de su encanto

• Hidrolato: es un concentrado de vitaminas y microelementos que se extrae de las plantas por destilación. Plantas salvajes que tienen propiedades muy poderosas y cuyo efecto sobre la piel es tal como su cuidado intensivo, dejándola suave y aterciopelada.
  • Hidrolato orgánico de oblepikha de altái: gracias al incremento de elasticidad e hidratación que le da a la piel, mejora su calidad de vida y la hace estar más saludable.
• Vitamina C: es la encargada de acelerar los procesos de regeneración celular (lo cual deriva en una piel más joven) y mejorar también las defensas de la piel.
• Coenzima Q10: es un antioxidante muy potente que previene el envejecimiento prematuro de la piel y evita la aparición de los primeros signos de la edad.

¿Cómo usarla?

Aprovechando todo el potencial que te da. ¿Y eso cómo se hace?

Es fácil: coge la cantidad equivalente a una almendra (¡sin cáscara!) y aplícala por todo el rostro limpio y seco dando un suave masaje. Evita la zona de los ojos, incluido el contorno (ya existen otros productos para hidratarlos) y déjala actuar de 10 a 15 minutos. Después, retírala con agua tibia.

Lo habitual es repetirlo una vez por semana, pero por ser tú, puedes hacerlo más veces si sientes que tu piel te lo pide.

Y, si además, te emociona tanto que quieres irte a dormir con esa sensación, puedes meterte en la cama con ella puesta y dejarla actuar durante la noche – sobre todo si tienes la piel seca -, pero es importante que antes retires el exceso de producto y por la mañana te laves bien la cara (como entendemos que sueles hacer, vaya).

Truco de la casa:

Aunque no lo parezca, la cultura nos influye hasta para estas cosas. Por eso, te recomendamos que, para evitar dejarte ninguna zona del rostro sin cubrir, empieces aplicándola por la frente y vayas siguiendo hacia abajo. Sintiendo como poco a poco va conquistando todos tus sentidos.

Esta mascarilla forma parte de la línea especial Oblepikha C-berrica. Indaga en ella y déjate llevar por las maravillas de esta colección.